Financiación autonómica de Baleares

Una historia de presión ciudadana

Guillem López Casasnovas

Catedrático de la Universitat Pompeu Fabra

Nacido en Ciutadella en 1955, se licenció en Ciencias Económicas, con premio extraordinario (1978) y en Derecho (1979) por la Universidad de Barcelona. Es doctor en economía pública por la Universidad de York. Entre 2005 y 2017 fue consejero independiente del Consejo de Gobierno del Banco de España. Ha sido profesor visitante en las Universidades de Sussex y Stanford y, desde 1996, es catedrático de Economía en la Universidad Pompeu Fabra. Es uno de los expertos más consultados y activos en la demanda de una financiación justa para las Islas Baleares.

Cuando en 2005 comenzaron las gestiones para mejorar el financiamiento, ¿cuál era la situación para las Islas?

Siempre ha sido más o menos la misma. Un Parlamento bastante amorfo en la reivindicación política del financiamiento, y una parte de la sociedad civil, encabezada por el Cercle d’Economia, más activa. Nunca se han computado los balances fiscales y solo en la etapa con protagonismo de Cercle (A. Forcades) y del consejero Carles Manera se puso el tema sobre la mesa del debate político.

Para usted no era una sorpresa esa discriminación. Creo que llevaba tiempo estudiando este fenómeno.

Sí. Y quizás por eso la presidenta Armengol me pidió que, como balear, participara en la Comisión estatal para la Reforma del Financiamiento que emitió su Informe en 2017, donde consta un voto particular mío bastante explícito de lo que había ido analizando académicamente y denunciando en mis artículos.

¿Y las causas? ¿Por qué estábamos tan alejados de la media del conjunto del Estado?

La razón básica era un nivelamiento que nos perjudicaba y un no reconocimiento de variables que influían en las necesidades de gasto de las Islas.

¿Se puede decir que el anterior sistema de solidaridad autonómica empobrecía a los baleares?

Lo que empobrecía y empobrece a los baleares era y es el sistema productivo que nos tienen asignados en las periferias. Lo que hacía el financiamiento autonómico, y hace, es no permitir apaciguar con suficientes recursos los estragos de este sistema productivo.

¿Qué hay de técnica económica y de política en las negociaciones de un sistema de financiamiento autonómico?

El inicio es técnico. Pero el debate rápidamente se politiza y al final se impone una salida según la correlación de fuerzas del momento.

¿Cuáles fueron los argumentos fundamentales para convencer en 2009 al Gobierno de que las Islas Baleares no podían seguir igual?

Que los índices de progreso y bienestar de las Islas no dejaban de empeorar, tanto en renta per cápita como en pérdida de capital humano con el abandono escolar y una creciente desigualdad social.

Usted es uno de los fundadores del Cercle d’Economia de Menorca y trabajaron conjuntamente con el de Mallorca y con muchas otras entidades de la sociedad civil. ¿Qué cree que fue el peso de esta movilización para conseguir los cambios de 2009?

¡Y socio del Cercle d’Economia de Barcelona y socio de honor del de Mallorca! Siempre he creído que cuando algo no funciona, más allá de criticar a los políticos, todos somos responsables y no movilizarnos nos hace culpables.

¿Qué aspectos del sistema no se consiguieron mejorar y cuáles sí?

En realidad, el éxito fue evitar una tendencia que nos alejaba de una aproximación nominal a la media del financiamiento y la imposición del denominado IVA colegial que nos hubiera desprotegido aún más de los efectos de la masificación turística sin participar mínimamente en los beneficios recaudatorios. En todo caso, seguimos sin un reconocimiento explícito del costo de vida diferencial en las Islas y la inclusión de las necesidades de la población que nos visita, y de la recién llegada que la sirve.

La sensación desde fuera es que el hecho de que las Islas Baleares tuvieran y tengan fama de comunidad rica juega en contra.

Sí. Acostumbrados a que las clases medias altas solventaran por su cuenta las carencias de un sector público cojo en las Islas, se tapaba la realidad de que el déficit fiscal era también un déficit social, que poco a poco estaba erosionando la cohesión ciudadana.

La realidad es que la renta de los baleares fue durante algunos años la más alta de España, pero ahora se encuentra más o menos a la mitad de las autonomías. ¿Hay una parte de responsabilidad de financiamiento público o las causas son variadas?

Todo en temas de bienestar social es poliédrico, pero las insuficiencias de una actuación pública con suficientes recursos y eficiente en su uso están sin duda detrás.

¿Las inversiones del Estado son otro punto negro para las Baleares?

Ciertamente. No responden a ninguna sistemática para el futuro de las Islas, de manera que son aleatorias. Reconocido esto, para responder con más contundencia estructurada, deberíamos tener el cómputo de la balanza fiscal balear, y no es el caso.

¿Cómo pueden afectar las concesiones de Sánchez a Cataluña en la negociación de la investidura al financiamiento de las Baleares?

Depende de la inteligencia del gobierno balear. Si por obediencia de partido no pueden sumarse a algo que los beneficiaría, al menos que tengan la sensatez de dejar hacer para aprender de los nuevos mecanismos de un nuevo sistema mayormente basado en la capacidad fiscal de las Comunidades.

¿Un sistema de ‘cupos’ como el del País Vasco y Navarra, con correcciones, sería posible y bueno para el Estado español de las autonomías?

Sí, para quien quiera perder garantías de cobertura de necesidades de gasto a cambio de mayor autogobierno. Diría que no habría cola. Algunas Comunidades quieren menos y no más autogobierno.

La Comunidad de Madrid siempre defiende que ella es la más solidaria. ¿Juega la misma liga?

No. Los recursos de los que disfruta no los gana solo desde sus bases fiscales. ¿Solidaria con otras Comunidades? ¡No! ¿Si hacen dumping fiscal? ¿Solidarios con sus propios habitantes de la Comunidad? ¡Tampoco! Si quitan impuestos a los ricos y abandonan servicios sociales para la población más vulnerable. ¡Un insulto más a la inteligencia!

Si finalmente se abre la negociación de un nuevo sistema de financiamiento autonómico, ¿cuáles deben ser las líneas rojas del Gobierno de Prohens?

Las líneas rojas son políticas. Yo diría que las que decidan, pero pensando en el país y no en la obediencia al partido por un supuesto bien superior.

Entrevistas

Algunos protagonistas de este proceso, entrevistados por el periodista Joan Riera, nos ayudan a comprender el camino recorrido y lo que queda por  hacer.

Alexandre Forcades Juan

Conseller de Economía y Hacienda 1987-1993. Presidente del Cercle d’Economia de Mallorca 2002-2014

Francesc Antich

Presidente del Govern Balear entre 1999-2003 i 2007-2011

Carles Manera

Conseller de Economía, Hacienda e Innovación 2007-2011

José Luis Rodríguez Zapatero

Presidente del Gobierno 2004-2011

Guillem López Casasnovas

Catedrático de la Universitat Pompeu Fabra

Antoni Costa Costa

Vicepresidente y Conseller de Economía, Hacienda e Innovación del Govern Balear desde 2023