– “Leopoldo Mozart nunca dejó que su hijo dejara de aprender. Le mantuvo los pies en el suelo” ha asegurado Ferrer
José Ferrer ha ofrecido la segunda audición guiada sobre la vida y la obra de Wolfgang Amadeus Mozart, esta tarde en la fundación Sa Nostra, de Palma. “Mozart fue un prodigio que nunca dejó de aprender. Tuvo diferentes profesores y todos le aportaron nuevas ideas y visiones de la música” ha asegurado Ferrer. En la que ha sido la segunda parte de la conferencia impartida por el gran conocedor de la música del compositor de Salzburgo, José Ferrer, se ha podido conocer los últimos años de Mozart, su muerte y su legado final con «el Requiem como obra final».
Una vez más, acompañado por su música, Ferrer ha explicado la formación que tuvo que llevar a cabo Mozart para convertirse en uno de los autores de música clásica «más importantes del mundo». Además, apoyándose en algunas de las imágenes de la película Amadeus, Ferrer ha explicado ante los más de 100 personas la relación real entre Mozart y Antonio Salieri. «Aunque en la película y en la novela correspondiente se hace referencia a una enemistad entre ambos, esta nunca existió. Se respetaban mutuamente y cuando Mozart falleció, Salieri estuvo presente».
Ferrer también ha desmentido la historia que asegura que fue Salieri la persona que encargó el Requiem a Mozart. «Un noble europeo disfrutaba de hacer creer a los invitados de sus fiestas que era compositor. Fue este el que encargó el Requiem al talento de Salzburgo, un trabajo que desgraciadamente nunca pudo ver acabada».