Las hermanas Fluxà –Thienneman, codirigen con su padre Miquel Fluxà (mejor CEO de España 2023 para Forbes) el gigante turístico Iberostar: Sabina como Vicepresidenta y CEO y Gloria como vicepresidenta y Directora de Sostenibilidad de la compañía. Ambas compartieron, en una cena coloquio exclusiva para los asociados, su apuesta decidida por un modelo de turismo responsable y de calidad.
Ellas están en la cabeza de la multinacional familiar mallorquina que nació hace 65 años en el mundo del turismo y cuyos orígenes empresariales se remontan a su bisabuelo Antonio (Mestre Toni) -artesano zapatero innovador- y a sus abuelos.
Explicaron detalladamente a los asistentes la evolución del grupo desde sus inicios hasta el principal núcleo de negocio, Ibersotar Hotels&Resorts con más de 100 hoteles de 4-5 estrellas, en 16 países, 35.000 personas, millones de visitantes y todo con una filosofía centrada en los cuidados de las personas y del entorno. Esta iniciativa se enmarca en su movimiento «Wave of Change» («Ola de cambio»), un proyecto pionero que Iberostar puso en marcha en el año 2017, destinado a proteger los océanos, y que, como detallaron, descansa sobre tres pilares fundamentales: el avance hacia una economía circular, el consumo responsable de pescado y marisco, y la mejora de la salud del mar y la costa.
Si bien han introducido la sostenibilidad como parte esencial en su modelo de negocio, también la visión de largo recorrido, la digitalización y la apuesta por la Inteligencia Artificial es otro pilar importante sobre el que descansa la estrategia de la compañía bajo la dirección de Sabina y Gloria Fluxá: “Otro de los retos a los que nos enfrentamos hoy es utilizar la tecnología para, en primer lugar, incrementar el conocimiento de nuestros clientes y poder adaptar la experiencia en los hoteles; y en segundo lugar, para ayudarnos a ser más eficientes»
Durante la cena se destacó que
Conocer, amar y cuidar nuestro entorno y nuestro mar, son esenciales para nuestra supervivencia. Y por eso, escuchar de primera mano que una organización gigante como la vuestra, que va por esa vía, y contrata, por ejemplo, a prestigiosos genetistas o biólogos de Stanford para estudiar corales o posidonia es, además de una alegría, una esperanza.
La nutrida presencia de socios, las cabezas que afirmaban, los gestos y las sonrisas, fueron signos evidentes del enorme interés que generó la magnífica intervención de nuestras invitadas.